Las confidencias de Rufi¨¢n y la culpa de los periodistas
En periodismo, ni en nada, no es lo mismo ocho que ochenta
En periodismo, ni en nada, no es lo mismo ocho que ochenta
Recomendaci¨®n y elogio de 'Ahora me rindo y eso es todo', de ?lvaro Enrigue
Razones para tomarse un respiro de la red social
Este martes hizo medio siglo de la primera piedra de la extraordinaria casa de C¨¦sar Manrique hecha bajo la lava de Tah¨ªche en Lanzarote
Esa frase de Camus jam¨¢s ha dejado de ser para mi un modo de empleo de la vida frente a las tentaciones, a veces insalvables, de la maldad que nos rodea
Alfaguara reedita los 'Cuentos completos' del escritor, obra magna del relato espa?ol contempor¨¢neo
Asocio la lectura a esta ¨¦poca del a?o, esa primavera pegajosa, de soles cegados por las nubes grises del Atl¨¢ntico, era la luz de mis lecturas, en los barrancos y hasta en las calles
En esta ¨¦poca del a?o es cuando parece que desaparecen las obligaciones que tenemos los seres humanos de ser puntuales
La vida breve del pen¨²ltimo titular de Cultura
Siempre hay un pimpampum en los gobiernos. En el ¨²ltimo el m¨¢s destacado pimpampum fue Crist¨®bal Montoro, por razones de bolsillo. Y ahora tenemos a Huerta. A ver c¨®mo le va
El fundador de Podemos es como los aficionados al f¨²tbol, que llegan antes a los campos para saludar por sus nombres a los jugadores; si pueden se acercan y los tocan
El l¨ªder de Ciudadanos ha iniciado la cruzada de himnos y banderas. Y donde anda una bandera, siempre hay detr¨¢s un ej¨¦rcito
Las palabras ensombrecen el chalet de la pareja Montero-Iglesias
Los art¨ªculos del presidente catal¨¢n no son noticias. Emite opiniones salvajes, fundamentalmente contra los espa?oles, que no requieren el esfuerzo que exige el oficio period¨ªstico
Decir que las cosas van mal es l¨®gico, much¨ªsimas cosas van mal. Pero, ?todas, todas? ?Es este un pa¨ªs impracticable? ?No funciona nada?
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha pasado un calvario del que la alivi¨® el esc¨¢ndalo del supermercado
La suposici¨®n de que el cineasta estadounidense es como lo pintan ha bastado para que el poder de la industria se sintiera cohibido ante la simple apelaci¨®n a la presunci¨®n de inocencia
Llama la atenci¨®n que la presidenta madrile?a dijera que hizo el m¨¢ster aunque no tuviera necesidad
El himno no necesita ni may¨²sculas ni letras. D¨¦jense de himnos y p¨®nganse a hablar, o a cantar, a ver c¨®mo resolvemos este periodo de hipnosis
Peligra la libertad de decir, de expresar. Peligra la libertad, triunfa el griter¨ªo que ampara el lugar com¨²n
Brecht dec¨ªa que se pod¨ªa cantar en los tiempos oscuros. Muchos j¨®venes, y no tan solo, est¨¢n cantando periodismo en el mundo, y no es l¨ªcito que les digamos que ya no vale la pena
Tiene m¨¢s importancia ahora un exabrupto que un pensamiento
A prop¨®sito de los insultos de Bernat Ded¨¦u a Llu¨ªs Bassets
La apelaci¨®n a los tribunales de la cadena catalana sobre un art¨ªculo publicado sobre ella en EL PA?S abre una v¨ªa ins¨®lita que pone en guardia a los periodistas y a los espectadores
En Twitter muchas veces pregunto a personas conocidas sobre opiniones contundentes que lanzan. Casi nunca responden. El pol¨ªtico de ERC s¨ª lo hizo; disculp¨¢ndose
Cuando el dedo de escribir sale disparado a la decisi¨®n de env¨ªo el mal ya est¨¢ hecho: lo denuncias, lo borras, lo lamentas, te disculpan, te perdonan, pero el mal est¨¢ hecho y es para siempre
Pasqual Maragall, actor y testigo de un momento de esperanza y desacuerdo
Si no opinas como yo, si no utilizas los argumentos homologados por la tribu, le?a al mono
Espa?a no se merece este momento porque tampoco se mereci¨® su vieja historia rota
Si persiste en decir que la Espa?a que hay merece el exilio, menosprecia gravemente esa palabra
Del mismo modo que Puigdemont ocult¨® en domicilios oscuros las papeletas del refer¨¦ndum, desapareci¨® y se refugi¨® en B¨¦lgica en busca de amparos asimismo oscuros
El escritor y editor fue campe¨®n de coloquios virtuales, cuando no hab¨ªa ni puente a¨¦reo ni Ave, sino voluntad de entendimiento, alegr¨ªa de encontrarse
El miedo es una bola muy concreta en el est¨®mago y tiene que ver con el miedo de todos, no s¨®lo el miedo personal
Honda es la melancol¨ªa que padecen ahora las viejas palabras, y prosperan como piedras esos n¨²meros: el 678, el 155