De la ropa al cine, pasando por las cocinas o los coches, nuestra sociedad pierde diversidad crom¨¢tica para restringirse a una paleta de neutros. ?Qu¨¦ nos est¨¢ sucediendo?
En un mundo dominado por lo digital, el libro f¨ªsico no solo sobrevive, sino que se reinventa como objeto de deseo. Recomendaciones de celebridades, ediciones cuidadas que triunfan en redes¡ ?Qu¨¦ hay detr¨¢s de esta nueva ¡°fetichizaci¨®n¡± del papel?
Marcas olvidadas desde hace d¨¦cadas regresan con fuerza ante el inter¨¦s de la Generaci¨®n Z que vuelve a sentirse inspirada por el universo del ¡®skateboarding¡¯
Defini¨® el estilo de la d¨¦cada de los dos mil vuelve con la esperanza de atraer a nuevos seguidores. Queda saber si podr¨¢ superar la maldici¨®n que se dice que la acompa?a.
El cocinero privado aterriz¨® en Londres con 17 a?os y sin apenas hablar ingl¨¦s, hoy cocina para la alta sociedad brit¨¢nica y su ¡®catering¡¯ atiende eventos exclusivos de Louis Vuitton, Bulgari o Rolls-Royce
El anuncio de la secuela retoma el inter¨¦s por est¨¢ comedia sat¨ªrica sobre la trastienda de las revistas de moda, tradicionalmente lugares donde el ambiente laboral es especialmente complicado
Georgiana Huddart rescat¨® una emblem¨¢tica marca de los ochenta para crear una propuesta de moda con filosof¨ªa de talla ¨²nica. Las copias han hecho que la confecci¨®n de su caracter¨ªstico tejido arrugado sea pr¨¢cticamente ¡°un secreto de Estado¡±, como dice ella
Los calcetines se convierten en indicador de edad y relevancia est¨¦tica. ¡®Millennials¡¯ y ¡®zoomers¡¯ no se ponen de acuerdo en cu¨¢l es el largo aceptable.
La inestabilidad econ¨®mica y la hegemon¨ªa de las grandes empresas ponen a las peque?as marcas en una posici¨®n imposible que obliga a muchas a abandonar la moda. ?Es posible sobrevivir en la industria de manera aut¨®noma?
El Observatorio del C¨¢ncer se?ala que el 57,2% de los j¨®venes creen que fumar est¨¢ de moda porque lo hacen actores, ¡®streamers¡¯ o ¡®influencers¡¯. 9 de cada 10 chicos y chicas est¨¢n expuestos al humo digital a trav¨¦s de publicidad expl¨ªcita y encubierta en las redes sociales
La manicura barroca que el creador de moda ha adoptado durante los ¨²ltimos meses, y que ocupa la mayor parte de su contenido en redes, se ha convertido en todo un fen¨®meno viral.
La cantante brit¨¢nica describi¨® la anterior gira de Swift como: ¡°Subir al escenario y saludar a ni?as de cinco a?os¡±. Su influencia y su disco estrella,, ¡®Brat¡¯, pretenden resetear la cultura joven
La viralidad superventas de Miu Miu, su hermana peque?a, y las inquietudes intelectuales de Miuccia Prada hacen de este conglomerado una excepci¨®n en plena crisis de la industria. Los expertos analizan su f¨®rmula m¨¢gica
Para la sombrerera brit¨¢nica, que ha tenido clientas como Madonna o Helena Bonham Carter y acaba de colaborar con Samantha Cameron, tocados, diademas y sombreros est¨¢n viviendo una reactivada popularidad gracias a las redes sociales
El documental ganador de la ¨²ltima edici¨®n del Moritz Feed Dog Festival rescata la vida de esta pionera que ha servido de inspiraci¨®n a Law Roach a la hora de vestir a Zendaya
Son los mocasines elegantes que llevan Norman Foster o Roger Federer. Detr¨¢s de la marca est¨¢ un treinta?ero franc¨¦s que dej¨® su carrera de ingeniero inform¨¢tico para aprender el oficio de zapatero. Una espa?ola ha dise?ado la primera colaboraci¨®n de la firma
Los comercios de siempre est¨¢n viviendo un resurgimiento. El hast¨ªo por las pantallas y la b¨²squeda de experiencias han propiciado la ca¨ªda del crecimiento de la venta ¡®online¡¯.
La dise?adora brit¨¢nica vende lo que podr¨ªa definirse como los Rolls Royce de andar por casa: Jennifer Lopez, Rihanna y Angelina Jolie son algunas de sus clientas y, cada Navidad, David Beckham le regala una de sus piezas a su esposa, Victoria
La sutileza de la cineasta contin¨²a ejerciendo una importante influencia en el imaginario colectivo, incluso en el de los m¨¢s j¨®venes, que la citan continuamente en TikTok como inspiraci¨®n
Hubo un momento en el que parec¨ªa que las cosas hab¨ªan cambiado. Pero, las ¨²ltimas semanas de la moda han puesto de manifiesto que el compromiso no es suficiente y que son las marcas independientes y peque?as las que mejor han entendido la necesidad la urgencia de tomar medidas.
El oscuro mercado de las falsificaciones ha abandonado la calle y se ha vuelto extremadamente sofisticado. Mientras tanto, las firmas de lujo invierten en tecnolog¨ªa para pon¨¦rselo cada vez m¨¢s dif¨ªcil a los que imitan sus productos.
Bienvenidos a la ¨¦poca del ¡®If you know, you know¡¯ (IYKYK en redes, y traducido ¡°si sabes, sabes¡±) del lujo, en la que los ultrarricos se visten para que otros ricos reconozcan todo el oro que llevan encima y alardeen de lo mucho que entienden de moda.
La actriz es tambi¨¦n el rostro de una generaci¨®n que se enfrenta a desaf¨ªos tan novedosos como aterradores. Fue estrella dist¨®pica de ¡®Black Mirror¡¯ o conoci¨® el despiadado mundo de la banca de inversi¨®n en ¡®Industry¡¯. Ahora se prepara para vivir un choque generacional con Julia Roberts.
Bruce Olfield creci¨® entre instituciones y hogares de acogida y mont¨® su marca gracias a un cr¨¦dito de una organizaci¨®n ben¨¦fica. Conoci¨® a Diana de Gales en un acto ben¨¦fico y desde entonces es el elegido por los ¡®royals¡¯ cuando necesitan conectar con los gustos del pueblo.
La segunda mano se posiciona como la estrategia sostenible m¨¢s popular. Con el consumo de moda de reventa en pleno auge, planteamos preguntas inc¨®modas pero necesarias.
La dise?adora vasca Amaia Arrieta acaba de ser premiada por la reina Isabel II. Entre sus clientes est¨¢n los duques de Cambridge: ¡°Son una pareja que intenta darle una vida normal a sus hijos y dedicarles tiempo¡±
Despu¨¦s de tres a?os sin publicar disco, la estadounidense ha vuelto con un nuevo ¨¢lbum, ¡®Special¡¯ y con proyectos en televisi¨®n y moda. La voluntad de cambio social mediante el optimismo es el nexo com¨²n de todo lo que hace.
Hasta 1983 no estuvo permitido mostrarlos en la televisi¨®n estadounidense, y solo en 1985 termin¨® la prohibici¨®n de destaparlos en las calles de Nueva York. Fue precisamente en esta d¨¦cada cuando Madonna, la princesa Leia en El retorno del Jedi o Cher normalizaron esta parte de nuestra anatom¨ªa en la cultura popular. Aunque mostrarlo en la edad madura, nunca ha dejado de ser tab¨².
Mientras la moda de lujo se devana los sesos pensando c¨®mo absorber los c¨®digos del la calle, Sofia Prantera, cofundadora de esta marca londinense, est¨¢ difuminando los l¨ªmites entre el ¡®streetwear¡¯ y la alta moda. Emily Ratajkowski o Rue, el personaje de Zendaya en ¡®Euphoria¡¯, apuestan por sus prendas.
Hablamos con el doctor Augustinus Bader, partidario de no rellenar ni camuflar las arrugas sino de trabajar para que las celulas trabajen desde dentro para reparar los da?os. Celebrities como Naomi Campbell, Courtney Cox, Carla Bruni, Goldie Hawn y su hija Kate Hudson conf¨ªan en sus tratamientos.