
Las promesas de los entrenadores
Conviene no fiarse demasiado de los t¨¦cnicos que acostumbran a no prometer nada en rueda de prensa
Nacido en Campelo (Pontevedra), lleva publicando columnas de opini¨®n en EL PA?S desde el a?o 2015. Colaborador habitual del Diario AS y la Cadena SER, donde cada lunes compone la mitad de La Dupla en el magaz¨ªn del Hoy por hoy. Autor de 'Alienaci¨®n Indebida' (C¨ªrculo de Tiza, 2018) y canterano, orgulloso, del Diario de Pontevedra.
Conviene no fiarse demasiado de los t¨¦cnicos que acostumbran a no prometer nada en rueda de prensa
M¨¢s de 5.000 napolitanos se juntaron para celebrar la victoria de su equipo en la Copa de Italia. Hay cierta ingenuidad -o hipocres¨ªa- en pretender que todo cuanto rodea al f¨²tbol se fuese a desarrollar de forma ejemplar tras la pandemia
Si Pau hubiese tenido alguna intenci¨®n real de jugar en el Bar?a le habr¨ªa bastado con expresar p¨²blicamente su deseo
Le ha pedido el cuerpo manifestarse como ¨¦l ha cre¨ªdo conveniente y lo propio, en una sociedad que se considera avanzada y democr¨¢tica, ser¨ªa defender su absoluto derecho a hacerlo
Lo que de verdad molesta del gal¨¦s es que no sea Cristiano Ronaldo porque la propaganda institucional teoriz¨® durante demasiado tiempo con esta posibilidad
No hay mejor modo de abonarse al realismo m¨¢gico en Galicia que vivir eternamente instalado en el diminutivo
El fichaje del madrile?o por la escuder¨ªa italiana viene a confirmar el talento que se le presupon¨ªa al piloto, una vez despojado de recelos y apellidos
Al estadio del Chelsea volvemos cada 6 de mayo porque el f¨²tbol, como lo vida, solo parece tener memoria para las bodas, los funerales y las enemistades irreversibles
De su extenso legado, me quedar¨ªa con su empe?o en hacernos comprender la aut¨¦ntica dimensi¨®n de Severiano Ballesteros
Ahora cuesta creerlo pero existi¨® un debate sobre si era el mejor jugador de baloncesto de los Estados Unidos
El deporte no es tan importante como nos gustaba fingir y por eso lo echamos tanto de menos
Del Bosque tiene que soportar el raca-raca de quienes improvisan juicios sumar¨ªsimos para decidir qui¨¦n es un buen o mal espa?ol
A la UEFA deber¨ªa importarle mucho m¨¢s la salud de sus aficionados y profesionales de lo que ha demostrado. Deber¨ªa, cuando menos, ser capaz de fingirlo, pero el dinero va siempre por delante
Tant d'afany van posar els botxins a enterrar el seu llegat, a embrutar la seva mem¨°ria, que un dia es van despertar i van descobrir que tots eren morts menys ell
Tanto empe?o pusieron los verdugos en enterrar su legado, en ensuciar su memoria, que un d¨ªa se despertaron y descubrieron que estaban todos muertos menos ¨¦l
M¨¢s temprano que tarde, los hinchas estaremos dispuestos a volvernos locos otra vez: los goles llegar¨¢n
Hay que reconocerle al Cholo unas cuantas cosas, entre ellas que suele jugar a los milagros y a veces los encuentra
En el f¨²tbol profesional no resulta sencillo gestionar las expectativas, m¨¢xime cuando uno aterriza en un club tan codicioso como el Real Madrid
Si el argentino se pone en la piel de Mahrez, Gabriel Jes¨²s o Sterling, recordar¨¢ c¨®mo era el f¨²tbol cuando un equipo entero se preocupaba de nutrirlo de balones cerca del ¨¢rea
Mientras la fundaci¨®n azulgrana promov¨ªa un programa para combatir el 'bullying', una empresa contratada por el club practicaba el acoso cibern¨¦tico
Nadie, a excepci¨®n de Fernando Hierro, hab¨ªa sido capaz de involucrar emocionalmente a un pa¨ªs entero en todas sus acciones
A las ¨®rdenes de Bartomeu han trabajado cuatro directores deportivos, tres entrenadores, y se ha fichado a m¨¢s de setenta futbolistas, pero apenas hay 17 jugadores para terminar la temporada
Los incidentes del pasado fin de semana en Valencia, y los insultos racistas a I?aki Williams en Barcelona, han vuelto a poner el foco sobre un problema que siempre est¨¢ presente
Con el c¨¢ntabro en el Bar?a vuelven a resonar los ecos de batallas pasadas, cuando la pasi¨®n por unos colores se revest¨ªa de carga ideol¨®gica
El despido de Valverde y fichaje de Seti¨¦n ahondan en la sensaci¨®n de que el Bar?a es un club en el que reinan Messi y el desgobierno
Pocas reivindicaciones me han parecido m¨¢s justas que la de H¨¦ctor 'el Negro' Enrique, autor del pase a Maradona en el conocido como Gol del Siglo, ante Inglaterra
La historia de Michael Schumacher no es solo la del ¨ªdolo alcanzado por la desgracia, ni una mera f¨¢bula de superaci¨®n, sino la b¨²squeda real de esperanza para los dem¨¢s
A caballo entre dos mundos, siempre abrazado a la prudencia, construy¨® Arsenio una carrera que termin¨® por hacerle justicia a base de mirar hacia atr¨¢s
Una parte del madridismo ya ven¨ªa indignada de casa, sin esperar a que el ¨¢rbitro les cargase de razones
?s evident que el pa¨ªs no ¨¦s el parad¨ªs sobre la terra que pregona el catal¨¤, per¨° les seves paraules tampoc s¨®n res de l'altre m¨®n
Por supuesto que el pa¨ªs no es el para¨ªso sobre la tierra que pregona el catal¨¢n, pero tampoco sus palabras son nada del otro mundo
Messi hace todo aquello que ning¨²n aficionado perdonar¨ªa a sus futbolistas pero convirti¨¦ndolo en amenaza
El ejercicio de sinceridad y contundencia practicado por Luis Enrique arroja luz sobre su divorcio deportivo y personal con Robert Moreno y dinamita cualquier intento de promocionar un relato alternativo
Lo que siempre se le ha reprochado a Gareth Bale es que no sea alguien diferente a Gareth Bale
De todas las opciones que ten¨ªa el presidente de la RFEF para justificar semejante desprop¨®sito, eligi¨® la v¨ªa altruista
La derrota ante el Levante y el empate con el Slavia son la confirmaci¨®n de una decadencia del equipo cada vez m¨¢s acusada
Al viejo faro de la radio espa?ola se le calent¨® la boca hablando del f¨²tbol femenino. En realidad se limit¨® a hacer aquello que le dio fama: decir lo que sea sin importarle las consecuencias
Ya vimos a Tiger Woods ganar una nueva chaqueta verde. Puede parecer una simple an¨¦cdota pero es m¨¢s que un serio aviso
El superagente Jorge Mendes es habitual en su gusto por el exceso, cualidad de aquellos que no lo han tenido f¨¢cil
El Bar?a ha necesitado de 44 a?os para espantarse esos miedos, y por fin, aunque fuese a mano alzada, refrescarse un poco la cara