Asumir que todos viv¨ªamos m¨¢s felices con presidentes que no polarizaban esconde una simulaci¨®n, un artificio de ocultamiento. Y en efecto, no polarizaban porque no lo necesitaban; simplemente gobernaban de espaldas al inter¨¦s de las mayor¨ªas.
Puedo no estar de acuerdo con el tono y algunas o muchas decisiones del Gobierno mexicano pero no tengo duda de que el giro de tim¨®n se ha dado en la direcci¨®n correcta
Las elecciones intermedias no pintaron de rojo el mapa de las gubernaturas o del poder legislativo. Pero no nos enga?emos, que no sea por goleada no significa que no sea una derrota para Joe Biden
Que el urgente giro de tim¨®n en beneficio de los sectores desfavorecidos hubiese sido menos polarizante y m¨¢s incluyente, m¨¢s socialdem¨®crata y menos obradorista, m¨¢s dialogante y menos ¡°tengan para que aprendan¡±.
Una cosa es que el delf¨ªn de L¨®pez Obrador ocupe la silla presidencial, otra que tenga la fuerza pol¨ªtica para mantener y profundizar las tareas heredadas. All¨ª es donde entra el ej¨¦rcito
Creo que entre los aciertos hay rasgos del obradorismo que traicionan a sus propias banderas. A estos claroscuros he dedicado mi columna estos a?os, aunque ello implique incomodar a unos y a otros
Mientras la discusi¨®n se establezca exclusivamente entre la satanizaci¨®n del Ej¨¦rcito o su beatificaci¨®n, estamos ignorando el urgente debate que tendr¨ªa que hacerse en M¨¦xico.
Qu¨¦ pasar¨¢ cuando el sucesor de L¨®pez Obrador enfrente la tarea de impulsar un programa encaminado a la justicia social en un contexto de generales ¡°empoderados¡± en tantas ¨¢reas de la vida p¨²blica
L¨®pez Obrador ha cuestionado las malas pr¨¢cticas, pero act¨²a ahora similar a ellas: madruguetes en las c¨¢maras y alianzas con gobernadores impresentables por conveniencia pol¨ªtica
No solo se trata de que el personaje resulta impresentable, el problema son los perjuicios cada vez mayores que provoca la ¡°impresentabilidad¡± de este se?or
Afirmar que la pol¨ªtica de seguridad de la 4T es un fracaso o que la llamada ¡°militarizaci¨®n¡± no ha hecho m¨¢s que empeorar la situaci¨®n, no es correcto
El debate tendr¨ªa que ser sobre el intento del presidente y Bartlett de cambiar la pol¨ªtica energ¨¦tica, no las leyendas negras que han tratado de colgarle por motivos aviesos
Me pregunto si no ha llegado el momento de intensificar la fuerza y capacitaci¨®n de la Guardia Nacional y modificar las ¨®rdenes para que asuma un control territorial que hasta ahora solo ha sido presencial
El sexenio ser¨¢ el de menor crecimiento econ¨®mico de la era moderna debido al entorno internacional desfavorable. Pero la fuerza pol¨ªtica que ha conseguido el obradorismo no tiene parang¨®n en m¨¢s de medio siglo
Decir que Morena y el obradorismo son un viejo PRI en versi¨®n 2.0, sirve para dar cuenta de algunos rasgos, pero esconde o distorsiona otros que son tanto o m¨¢s significativos
La larga trayectoria y la estatura pol¨ªtica de la que goza por derecho propio, que podr¨ªan ser virtudes en otras circunstancias, se convierten en un lastre para efectos de ser considerado el delf¨ªn del l¨ªder del movimiento
No es la primera vez que el presidente se excusa de participar en una cumbre. Ahora se las arregl¨® incluso para posiblemente ausentarse y, al mismo tiempo, obtener alguna ventaja
En la polarizaci¨®n a la que se ha entregado el presidente o en el llamado a filas al grito de est¨¢s conmigo o en contra de m¨ª, la lealtad ha sustituido al criterio de honestidad
Si no camina esta reforma por razones pol¨ªticas, habr¨ªa que inventar otra para sanear un sector que opere en beneficio de todos los mexicanos y no para un pu?ado de empresas
El legado de Andr¨¦s Manuel ser¨¢n banderas dignas y respetables en su mayor parte, pero portadas por muchos que no creen en ellas y solo les representa una oportunidad para escala
La permanencia en el m¨¢ximo puesto de la procuraci¨®n de justicia de un personaje con la reputaci¨®n destruida produce un da?o incalculable a un gobierno que desea hacer las cosas de manera diferente
La tendencia expansiva de la delincuencia muestra que hace tiempo se cruz¨® el l¨ªmite en el que el sistema de justicia o las polic¨ªas civiles pod¨ªan enfrentarlos
M¨¢s all¨¢ de que siempre ser¨¢ una buena noticia para los ciudadanos el castigo de un presunto corrupto, el hecho es que el caso de El Bronco no abona a una cruzada por la honestidad en las altas esferas
Hay un riesgo en el hecho de que no exista un m¨ªnimo de reglas del juego para resolver los conflictos; sin tales acuerdos b¨¢sicos, la vida p¨²blica puede convertirse en una rebati?a con sabor al viejo oeste
Frente al bombardeo de ciudades y el sufrimiento de millones con el argumento de que un gobierno no est¨¢ de acuerdo con el del vecino, no hay donde perderse, salvo por mezquinos argumentos ideol¨®gicos