Yolanda D¨ªaz no enterr¨® a Podemos, ni al 15-M
No es de extra?ar la incomodidad de ciertos sectores afines a Podemos con Sumar, como s¨ªmbolo que les obliga a mirarse ante el espejo de sus propias contradicciones
No es de extra?ar la incomodidad de ciertos sectores afines a Podemos con Sumar, como s¨ªmbolo que les obliga a mirarse ante el espejo de sus propias contradicciones
La irrupci¨®n en la escena p¨²blica de determinados nuevos actores pol¨ªticos si a algo ha terminado pareci¨¦ndose es a un ¡®remake¡¯ de una vieja obra, en el que hasta los peores errores del pasado se ven repetidos
Le corresponde a Yolanda D¨ªaz coordinar todo el espacio m¨¢s all¨¢ del bipartidismo, pero tiene que hacer lo que est¨¦ en su mano para que las fuerzas de ese ¡®frente amplio¡¯ sean bien tratadas. Si van separadas, las ahorcar¨¢n juntas
Con Sumar se acabar¨ªan los exabruptos del socio peque?o de la coalici¨®n porque la vicepresidenta impondr¨ªa sus formas sosegadas para llegar a acuerdos
La izquierda observa no sin inquietud c¨®mo se desarrolla en Madrid una sorda batalla por el control del futuro sujeto pol¨ªtico en v¨ªsperas a las elecciones municipales y auton¨®micas de mayo
El joven pensador madrile?o, que tiene 143.000 seguidores en YouTube, dedica su ¨²ltima novela a las distintas formas de libertad
El desencanto actual nace de una quiebra de las elevadas expectativas ante la llegada de los partidos de la coalici¨®n al Gobierno y la incapacidad de ofrecer un horizonte ilusionante ante la desaz¨®n inflacionista
No se pretende modificar la realidad, sino inventarla, corregirla tambi¨¦n retrospectivamente, y forzar el asentimiento p¨²blico y legal de esa depuraci¨®n: la nueva normalidad como psicosis colectiva de la correcci¨®n pol¨ªtica
La red social es un archivo p¨²blico vivo donde han quedado documentados todos los episodios relevantes, desde la Primavera ?rabe a la guerra en Ucrania, pasando por procesos electorales, cat¨¢strofes naturales o ataques terroristas
La Audiencia de Barcelona conden¨® inicialmente al mando policial a dos a?os y cuatro meses de c¨¢rcel
El estado de ¨¢nimo de la sociedad est¨¢ cambiando, como ya sucediera en etapas anteriores desde mayo del 68, y solo los liderazgos socialdem¨®cratas fuertes son capaces de enfrentarse a la pulsi¨®n conservadora
La incapacidad para concretar transformaciones est¨¢ llevando a Junts y ERC a tomar caminos diferentes
Cada grupo humano se siente orgulloso de lo que ha hecho y es cuestionado por sus descendientes, que lo har¨¢n de nuevo mal y que, por eso, deber¨ªan contemplar la petulancia de sus mayores con un poco de piedad y hasta de ternura
Los sueldos en Espa?a deber¨ªan ser un esc¨¢ndalo, pero si uno ha nacido subsistiendo, y es lo que palpa en su entorno diario, acaba viendo diluida la noci¨®n de sufrir una tragedia individual o colectiva
El reto es combinar proyectos ilusionantes en positivo, liderazgos atractivos y espacios organizativos que potencien los v¨ªnculos de ciudadan¨ªa, la proximidad y los espacios comunes en una sociedad digitalizada
La idea de democracia naci¨® en las sociedades modernas como ideal revolucionario. Hoy, en demasiadas ocasiones, se defiende como justificaci¨®n de lo existente
Desde la terraza de un bar de Lavapi¨¦s cada domingo Miguel ve¨ªa pasar una manifestaci¨®n de j¨®venes indignados vomitando con el meg¨¢fono consignas, arengas y pareados muy violentos
Lo siguen llamando democracia y sigue sin serlo, la crisis sigue siendo una estafa, siguen mandando los mercados aunque no los hayamos votado y seguimos siendo la primera generaci¨®n que vivir¨¢ peor que sus padres
No est¨¢n claros los efectos de la crisis del coronavirus en la recreaci¨®n de movimientos sociales y arquitecturas pol¨ªticas. Aunque apunta un mayor hincapi¨¦ en la atenci¨®n a las conductas de la dirigencia
Los movimientos contra la despoblaci¨®n se equivocan al constituirse en partidos pol¨ªticos y concurrir a las elecciones; su representaci¨®n reducir¨¢ un debate necesario de pa¨ªs a una negociaci¨®n de concesiones
La falta de expectativas en el ¨¢mbito laboral y el inmovilismo pol¨ªtico est¨¢n arrojando de forma alarmante a la juventud a un nuevo paradigma antisistema, individualista y reaccionario
Las reivindicaciones en l¨ªnea funcionan como un arma de doble filo: visibilizan de forma r¨¢pida y contundente, pero pueden hacernos olvidar la necesidad de acci¨®n en el mundo real
La mejor respuesta contra el proyecto de involuci¨®n pasa por desarrollar los aspectos sociales de nuestro ordenamiento, que siempre se han considerado derechos potenciales m¨¢s que efectivos
Espa?a vivi¨® en 2011 una crisis del sistema con protestas transversales, pero las reivindicaciones de hoy son sectoriales y con posibilidad de negociaci¨®n
La jueza em¨¦rita y exalcaldesa de Madrid critica en su nuevo libro el uso de la mentira, la mercadotecnia y la agresividad por parte de la clase pol¨ªtica
A la izquierda le corresponde ahora hacer emerger la realidad en un mundo que naufraga en medio de ficciones cada vez m¨¢s insostenibles, con las que se pretende aplacar los efectos de unas brechas econ¨®micas, sociales y culturales que nadie quiere afrontar
Los menores de 40 a?os pierden parte de la representaci¨®n que tuvieron tras el 15-M, seg¨²n un estudio, pero sus problemas ganan espacio
La reducci¨®n de las obras literarias a una dimensi¨®n ideol¨®gica prescindiendo de su elemento trascendente conlleva en ¨²ltimo t¨¦rmino encerrarlas en una atm¨®sfera ¡®guerracivilista¡¯
En ¡®Con todo. De los a?os veloces al futuro¡¯, I?igo Errej¨®n refleja una Espa?a entendida como un proceso de negociaci¨®n incesante entre un orden, necesitado de consentimiento social, y sus numerosas grietas impugnadoras
Ahora la revoluci¨®n est¨¢ en manos de una creciente multitud de j¨®venes que tratan de asaltar el poder, no mediante la c¨®lera social. sino sirvi¨¦ndose del placer de beber, de gozar y no cesar hasta derribar la muralla
El ambivalente sentimiento centra el encuentro de artes y pensamiento, con Jordi Savall, Maria Arnal y Marcel Bag¨¦s, Enric Casasses, Sandra Balsells y Josep Maria Esquirol entre los invitados
La generaci¨®n de la crisis de 2008 se busca en el pasado con fuertes dosis de sentimentalizaci¨®n y un antielitismo que hace de lo popular y lo an¨®nimo los depositarios morales de un modelo dilapidado por el progreso
La mala cabeza de un chico de Malasa?a convirti¨® a todo el pa¨ªs en un pozo de indignaci¨®n
Tan falaz es que todo tiempo pasado fue mejor como lo contrario. ?Por qu¨¦ es m¨¢s de izquierdas matar al padre que amarlo y aprender de ¨¦l?
El int¨¦rprete madrile?o, fundador del extinto Pav¨®n Teatro Kamikaze, debuta con Pedro Almod¨®var en ¡®Madres paralelas¡¯ y defiende que todo trabajo esc¨¦nico es un acto pol¨ªtico
Descartados los viejos clich¨¦s comunistas, es hora de ensayar nuevas propuestas. Tambi¨¦n los socialdem¨®cratas europeos est¨¢n en modo reinvenci¨®n
Un d¨ªa en Aranjuez con la autora de ¡®Feria¡¯, el fen¨®meno editorial que ha colocado en el debate p¨²blico las expectativas de los mileniales: ¡°El eje es m¨¢s entre arriba y abajo que entre izquierda y derecha¡±
El catal¨¤ perd pres¨¨ncia a l¡¯espai p¨²blic a causa de la pressi¨® de dues ideologies antag¨°niques
La gran iron¨ªa es que, despu¨¦s de deslegitimar la pol¨ªtica y su ejercicio, se acabe reproduciendo lo peor de ella
Quiz¨¢ permitir el sufragio a partir de los 16 a?os ayudar¨ªa a impulsar soluciones pol¨ªticas a los problemas sist¨¦micos que retrasan la emancipaci¨®n y comprometen el futuro de las nuevas generaciones