
Allende, ?mito o inspiraci¨®n?
Siempre nos quedar¨¢ la duda de c¨®mo hubiese podido evolucionar Chile, ese primer ensayo latinoamericano de tr¨¢nsito desde la democracia al socialismo
Es Catedr¨¢tico de Ciencia Pol¨ªtica en la Universidad Aut¨®noma de Madrid y miembro de n¨²mero de la Real Academia de Ciencias Morales y Pol¨ªticas.
Siempre nos quedar¨¢ la duda de c¨®mo hubiese podido evolucionar Chile, ese primer ensayo latinoamericano de tr¨¢nsito desde la democracia al socialismo
En alg¨²n momento habr¨¢ que decir ¡°hasta aqu¨ª¡±, pasar a ocuparse de los problemas reales del pa¨ªs y no de entidades metaf¨ªsicas como el ser de los pueblos
Los BRICS se fortalecen con la intenci¨®n ¨²ltima de China y Rusia de armar una verdadera alternativa al dominio geopol¨ªtico de Occidente
No me hago muchas ilusiones, esta legislatura ser¨¢ en gran medida similar a la anterior, el b¨¢lsamo de Fierabr¨¢s de la polarizaci¨®n
No puedo dejar de sorprenderme por el inmenso contraste entre la hipermoralizaci¨®n casi hist¨¦rica de la disputa pol¨ªtica en el interior de las democracias y la amoralizaci¨®n total hacia lo que ocurre en el exterior
Esta legislatura se nos viene encima una asfixiante discusi¨®n cotidiana de naturaleza casi metaf¨ªsica sobre el ser de Espa?a, las Espa?as o el Estado espa?ol
Los cordones sanitarios penden de un hilo, incluso en Alemania y Francia, y cada elecci¨®n es una prueba de resistencia
Hoy, lo que deber¨ªa ser el d¨ªa de la fiesta de la democracia se va a convertir para la mayor¨ªa en el d¨ªa de la tortura, de la ansiedad ante la posible victoria del otro
Es bien sabido que en nuestra cultura medi¨¢tica la atenci¨®n es directamente proporcional a la intensidad de la desavenencia. Por eso tienen tanta presencia en nuestro espacio p¨²blico las hip¨¦rboles populistas
Es pronto para decirlo, porque curiosamente es el partido sobre cuya intenci¨®n de voto hay m¨¢s discrepancia en las encuestas, pero deben de estar encantados, entre todos les estamos haciendo la campa?a
Son cada vez m¨¢s los l¨ªderes de extrema derecha en las canciller¨ªas del viejo continente. Lo que ya es menos comprensible es el porqu¨¦ de su normalizaci¨®n en Europa y, por lo que se ve, tambi¨¦n entre nosotros
Predomina una actitud de partidismo negativo: no es que nos entusiasme el nuestro, lo que nos horroriza es el contrario
Cuando se observa la extra?a trayectoria de estos privilegiados pillos posmodernos el calificativo de populistas se nos queda corto
Ahora que se habla tanto de la resurrecci¨®n del bipartidismo, no deja de ser extra?o que uno de sus protagonistas se autodifumine, en lo discursivo al menos, dentro del bloque, renuncie a recuperar su anterior estatus
Es necesario abordar el asunto con realismo y acorde con nuestros supuestos principios morales, alejando su instrumentalizaci¨®n por intereses electorales cortoplacistas
Despu¨¦s de esta enloquecida legislatura que hemos tenido no cab¨ªa esperar otra cosa. Pero eso no quita que debamos aceptarlo como un destino, reducir la democracia al choque de los consabidos partidismos
Cuanto m¨¢s compleja se hace la gobernanza, tanto m¨¢s infantil y primaria resulta la respuesta de los ciudadanos insatisfechos
La inclusi¨®n de algunos exetarras sentenciados por delitos de sangre en listas electorales de Bildu arroja una nueva sombra de duda sobre todas las predicciones del 28-M
Los conservadores le acusan de olvidar los v¨ªnculos con las comunidades nacionales mientras los progresistas le afean que haya dejado atr¨¢s la igualdad entre personas y grupos sociales
Francia, como es sabido, no est¨¢ en estos momentos para el tradicional exhibicionismo de sus ¨¦lites
La discusi¨®n clim¨¢tica se nos ha echado encima en plena campa?a electoral y lo que deber¨ªa ser un acuerdo transpartidista puede acabar sum¨¢ndose a la enorme lista de asuntos que nos dividen
La opresi¨®n en las sociedades cerradas es meridiana y contundente. El efecto del enga?o y la desinformaci¨®n en las sociedades democr¨¢ticas es m¨¢s sibilino
Est¨¢bamos advertidos de que Espa?a iba a ser el pa¨ªs europeo m¨¢s afectado por el cambio clim¨¢tico, que la desertificaci¨®n era una amenaza real. ?Qu¨¦ hemos venido haciendo para evitarlo?
El expresidente chapotea como nadie en las turbias aguas de la nueva pol¨ªtica emocional, y se maneja con destreza en los siempre peligrosos espacios de la victimizaci¨®n y la conspiraci¨®n
A nadie se le escapa que ese dise?o leninista, de control del todo desde un centro, es el que est¨¢ detr¨¢s de las resistencias al acuerdo. Esto no va de p¨¢jaros y flores, va de poder
La ¨²nica alternativa est¨¢ en que las protestas se traduzcan en m¨¢s y mejor democracia
Hay pocas dudas de que la legislatura est¨¢ agotada y de que nuestros actores pol¨ªticos est¨¢n exhaustos
S¨¢nchez no puede afrontar el nuevo periodo electoral habiendo perdido la iniciativa, y solo tiene tiempo y munici¨®n para introducir una ¨²nica sorpresa: una crisis de gobierno a fondo
?C¨®mo es posible que tantos j¨®venes solo encuentren un sentido a su vida integr¨¢ndose en pandillas hermanadas a trav¨¦s de rituales sangrientos? Pero no es menos inquietante nuestra propia indiferencia
Al final a uno siempre le queda la duda de si m¨¢s que una disputa en torno a visiones feministas no estamos en realidad ante el m¨¢s cl¨¢sico juego de los intereses electorales de partido
Una de las cosas terribles de esta guerra es su contribuci¨®n a destabuizar el choque entre grandes potencias. Se nos han cambiado las tornas sobre las que hab¨ªamos pensado los desastres futuros: pierde fuerza el apocalipsis clim¨¢tico y gana el militar
Dado que nuestro bibloquismo veta todo entendimiento transversal, la se?al que se emite con las discrepancias es que votar socialista lleva aparejado seguir acarreando la mochila de Podemos
El presidente turco anda ahora como pollo sin cabeza desplegando su presencia por todas las zonas afectadas por el se¨ªsmo
El impulso hacia la confrontaci¨®n est¨¢ tan automatizado que el contenido sobre el que se organiza la bronca desaparece detr¨¢s de las increpaciones mutuas
Esta maldita guerra de Putin nos ha sacado a todos del carril hist¨®rico por el que hab¨ªamos apostado para arrojarnos a una contienda que no podemos esquivar
Que abandonen toda esperanza quienes todav¨ªa conf¨ªan en una presentaci¨®n m¨¢s o menos racional de las propuestas electorales de los dos grandes partidos
Es importante ser conscientes de que este peligro existe y que la ¨²nica vacuna es el fortalecimiento de las instituciones y una ciudadan¨ªa vigilante
La pol¨ªtica casi siempre es conflicto, pero es la forma mejor de estar en desacuerdo. El que se ve obligado a aportar razones, aunque no convenzan, al menos respeta impl¨ªcitamente al interlocutor
Lo que ahora impera es la pol¨ªtica del mal menor, el tratar de evitar lo peor. Ya no aspiramos, por ejemplo, a m¨¢s y mejor democracia, sino a no perderla, a que no degenere en el iliberalismo. As¨ª con casi todo
En este pa¨ªs de tanto patriotismo desatado, el ¨²nico que est¨¢ perdiendo pie es justo aquel que permite que todos los dem¨¢s puedan convivir