Fernando Savater

Escrib¨ª cosas hoscas, quiz¨¢ injustas, desde luego impertinentes contra Madrid, la ciudad a la que culpaba de haberme robado la ni?ez. Pero ella no se dio por enterada ni me devolvi¨® mi antipat¨ªa

Ella quer¨ªa que yo eligiese un poema para que fuese le¨ªdo en la ceremonia civil de su boda, en lugar de algo adocenado y empalagoso decidido por un funcionario. Un poema de amor, claro

Vivimos un momento terrible, peor que en Mariupol, ?diga usted que s¨ª!

El documental ¡®Las buenas sombras¡¯ habla de una ¨¦poca, ayer mismo, en la que algunos, para ser ciudadanos ¡°normales¡±, necesitaron la abnegaci¨®n de escoltas tan valientes como discretos

El escenario internacional es un territorio salvaje donde las leyes son poco m¨¢s que piadosos deseos y prevalecen la fuerza y los crudos intereses

Se?alar los males del capitalismo es justo y ¨²til; considerarlo como el puro mal resulta imb¨¦cil

Sara, esta noche me pondr¨¦ otra peli que pueda gustarte, aunque ya hace siete a?os que no vemos cine juntos. ?O s¨ª?

Nadie se atreve a recordar a tan creativos legisladores que la educaci¨®n consiste en que lo que sentimos se gu¨ªe por lo que sabemos y no lo que sabemos por lo que sentimos

No existe progreso en apoyar un Gobierno de izquierdas sostenido por los separatistas, ni en repetir hasta el hartazgo en los medios la letan¨ªa contra la derecha, ni en esgrimir desvergonzadamente un ¡°no a la OTAN¡± para vender el s¨ª a Putin

Me alivia saber que motivos tan personales como la antipat¨ªa o la seducci¨®n, la pereza o el despiste influyen en los torbellinos de la pol¨ªtica

Harto del pulular por los noticiarios de apestosos bribones, nocivos pero rastreros, me ha dado por recordar a los mejores villanos cinematogr¨¢ficos, es decir los peores de todos

Hoy lo progre es creer que hay almas atrapadas en cuerpos que no les corresponden, que no existen varones ni mujeres pero s¨ª quienes se sienten lo uno o lo otro

El 8 de febrero de 2003, ETA asesin¨® en Andoain a Joseba Pagazaurtundua por ser buen socialista, buen polic¨ªa, buen vasco y desde luego buen espa?ol, graves cargos en esas latitudes entonces y ahora

La suposici¨®n cari?osa de que la moral depende de la capacidad de sufrir y no de la intenci¨®n de actuar proviene de la suplantaci¨®n anglosajona del humanismo por el humanitarismo. Hoy ya es universal entre quienes creen estudiar ¨¦tica cuando en realidad se dedican todo lo m¨¢s a cuidados paliativos

Con motivo de la pandemia hay gente que elucubra cosas raras sobre ese concepto

?Puede uno salirse de la ancianidad por arriba, en vez de limitarse a no alcanzarla, como tantos? Entonces la muerte no llegar¨¢ como algo justificado sino como una interrupci¨®n impertinente

En esta ¨¦poca en que lo venial se convierte en monstruoso y lo monstruoso pasa por venial, me parece un deber intelectual oponerse a lo pol¨ªticamente corregido

Los fan¨¢ticos separatistas no quieren defender el catal¨¢n, tan rozagante, sino dinamitar el castellano para as¨ª acabar con toda vinculaci¨®n cultural y social con el resto de Espa?a

Pienso que nuestra Constituci¨®n es la ley fundamental contra los lobos que amenazan los derechos de libres e iguales. Esa feroz manada de separatistas que asaltan el redil de los que quieren vivir juntos en paz

Nuestro planeta, como alojamiento, deja bastante que desear y puede resultar frecuentemente hostil e imprevisible

Hace a?os una se?ora me dijo: ¡°Ya s¨¦ que no es creyente, pero yo rezo mucho por usted¡±. Le contest¨¦ ¡°Siga, por favor. Creo poco en Dios, pero como buen espa?ol creo en las recomendaciones¡±

La filosof¨ªa no ense?a a pensar aut¨®nomamente, sino que quienes piensan con autonom¨ªa suelen acabar haciendo eso que llamamos filosofar

La pandemia nos ha vuelto a todos cartesianos casi sin querer. Tambi¨¦n las cinco pol¨ªticas que se reunieron en Valencia para iniciar ¡°algo maravilloso¡± me parecen cartesianas, o sea disfrazadas

Es de agradecer que en estos tiempos inquisitoriales y puritanos, Vinterberg lanza sobre el alcohol una mirada bastante desprejuiciada

Confieso mi escasa preocupaci¨®n por la salud de este planeta. La de sus habitantes en cambio me interesa m¨¢s, por razones de parentesco

El antiqu¨ªsimo juego de la prostituci¨®n mezcla los dos deseos depredadores. Ahora el PSOE promete abolirla y, aunque nadie medianamente cuerdo cree que sea posible, se enciende una entretenida pol¨¦mica

Un d¨ªa, Jack el Destripador comunic¨® a la Polic¨ªa que lo dejaba. Cuando sali¨® de prisi¨®n, muchos le vieron como un tipo valiente que hab¨ªa luchado contra la prostituci¨®n en el barrio

Ser hombre es una ficci¨®n y tom¨¢ndoselo demasiado en serio acaba uno esclavizado

Necesitamos hombres ingeniosos para convencer a los remisos de que se pongan la vacuna contra la covid-19 y acabar con esta plaga como con otras

Los herejes e incr¨¦dulos son condenados al infierno de la cancelaci¨®n por otro episcopado no menos severo que el de anta?o

Para no defender esta posici¨®n por imitaci¨®n o rutina hay que ser l¨²cido y, aunque suene parad¨®jico, audaz

Tenemos nuestro Sendero Luminoso, que se posiciona en las instituciones vascas para proponer una educaci¨®n que acabe de desterrar el castellano de las aulas y borre los v¨ªnculos administrativos con la Espa?a constitucional

La juventud siempre ha sido un esc¨¢ndalo, la madurez un aburrimiento y la vejez una humillaci¨®n

Subir propulsado hasta donde no hay aire puro sino que falta absolutamente el aire es un capricho insano. Y m¨¢s para ver la tierra como un globo nublado

El escritor ha mutado hasta convertirse en lo que Chesterton defini¨® como un cl¨¢sico: un rey del que se puede desertar pero al que no se puede destronar

No es sencillo encontrarlas nobles o sensatas que no hayan justificado atropellos

Este a?o las circunstancias en Epsom han sido an¨®malas, tanto como para los espectadores como para el autor, pero el linaje de los campeones no ha dejado de mostrarse sobre el ¡®turf¡¯

Algunos no quieren eutanasia pero nadie rechaza los cuidados paliativos: s¨®lo por esto ya deber¨ªamos dedicarles m¨¢s atenci¨®n

En cuesti¨®n de huevos falsos, no son los peores aquellos que no guardan cr¨ªas en su interior sino los que albergan monstruos imprevistos

La prensa regional cultiva esa secci¨®n que nos retrotrae a una vida social de tama?o m¨¢s humano y con ¨ªnfulas menos cosmopolitas