Fascismo de andar por casa
Por culpa de los independentistas catalanes la causa kosovar, justa, seguir¨¢ pareciendo a muchos un peligroso precedente
Por culpa de los independentistas catalanes la causa kosovar, justa, seguir¨¢ pareciendo a muchos un peligroso precedente
?Desde qu¨¦ bandera se pide la tregua con la estelada?: ?la constitucional?, ?la republicana?, ?desde ninguna?
Nunca nadie pidi¨® tanto apoyo para hacer tan poco, tan tarde ni tan mal
Esto va de democracia, nos dicen los independentistas. Pero no es cierto. Va del intento de romperla
L'independentisme ha crescut els ¨²ltims anys emparat en un grapat d'afirmacions propagades pels seus l¨ªders que no resisteixen una an¨¤lisi seriosa
La extrema izquierda se sube al carro del desaf¨ªo independentista a ver si consigue echar a Rajoy desde la calle y provocar una crisis de Estado
No comparemos Catalu?a con Escocia sino con el Brexit.
Prevalecen el hartazgo y el temor a estar atrapados en una peligrosa espiral
El nacionalismo castellano, el vasco y el catal¨¢n han intentado sucesivamente imponer sus identidades y excluir a los disidentes. Su fracaso, v¨ªctima de sus excesos, permite vislumbrar una Espa?a abierta a la vez que plural
De las redes no nos interesa otro estado que el de la combusti¨®n espont¨¢nea: solo nos parecen relevantes cuando arden
?Es seguir imaginando naciones imaginarias la manera de resolver nuestros problemas?
Dion, representante ante la UE de Canad¨¢, defiende que "la unidad de Espa?a es algo a resolver con arreglo a su Constituci¨®n"
?Cu¨¢l es la pregunta cuya respuesta incluye la disposici¨®n a saltarse la ley?
Estamos ante un debate bronco y asfixiante en el que las garant¨ªas democr¨¢ticas son las primeras v¨ªctimas
Los perfiles psicol¨®gicos de Donald Trump y Kim Jong-un son ¨Cpor decirlo educadamente¨C inquietantes
Una respuesta de Narbona a un tuitero con seis seguidores anunci¨® el giro socialista ante el CETA
La soledad de muchos acad¨¦micos ha encontrado en las redes el alivio que da el parloteo banal
El empe?o de un pa¨ªs encerrado en s¨ª mismo por convertirse en un pilar del proyecto europeo
Retornamos estos d¨ªas a la furia moral, exasperada e irracional de los que aspiran a derribarlo todo para construirlo todo
La diplomacia espa?ola ha llegado a ser una maestra en ponerse de perfil ante Trump
El mundo de acuerdo con el presidente es un delirio absoluto en manos de un incontrolado. Es imposible que acabe bien
Un mismo partido, casi 40 a?os despu¨¦s, dos estrategias distintas
Acabaremos hablando de un tratado de no proliferaci¨®n de armas inform¨¢ticas y de la prohibici¨®n de armas de destrucci¨®n masiva digitales
Si el PSOE quiere volver al poder, los militantes tienen que dejar de pensar en s¨ª mismos y seducir a los que no lo son
El nuevo presidente franc¨¦s rompe con el relato de la derrota
Al negarse a condenar al r¨¦gimen venezolano, Alberto Garz¨®n e Izquierda Unida repiten un viejo error. Pero no siempre fue as¨ª. El PCE supo estar al lado de la democracia
La derecha siempre lo tiene claro: vota para que no gane la izquierda
Con Macron puede comenzar el rearme republicano frente a los extremismos populistas
Le Pen y M¨¦lenchon venden utop¨ªas regresivas, mitos de la feliz aldea gala que resiste al invasor, sea este quien sea
No se da cuenta Erdogan de que hace tiempo que le dijimos adi¨®s y le quitamos el volumen al televisor
Al presidente de EE UU no le viene mal aparecer, aunque sea durante diez minutos, como alguien que no est¨¢ plenamente alineado con Putin
Entre las 1.455 palabras del discurso inaugural de Trump no aparecen ¡®democracia¡¯, ¡®derechos¡¯ o ¡®justicia¡¯ ni una sola vez
La firma de la carta pidiendo la activaci¨®n del 'Brexit' es un fracaso colectivo
Compararse con EE UU es una receta segura para la melancol¨ªa
El verdadero papel de la idea de la tierra prometida es que la comunidad siga avanzando por el desierto y que no escuche a los que quieren retroceder
La C¨¢mara Alta se ha atrevido a hablar en nombre de los que no tienen voz y defender los derechos que los comunes no han querido defender
Seg¨²n una encuesta, la mitad de los catalanes considera que no tiene informaci¨®n suficiente sobre las consecuencias de una eventual independencia
?De verdad queremos seguir viviendo en una sociedad que discrimina a nuestras madres, hermanas, esposas, hijas y amigas solo porque son mujeres? No cabe la menor duda de que ellas est¨¢n haciendo su parte; nosotros, no
Hist¨®ricamente, los incrementos masivos en los presupuestos de seguridad han sido el preludio de un conflicto