Replicantes
La uberizaci¨®n se mueve en el filo que separa lo legal de lo ilegal
Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, adem¨¢s del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.
La uberizaci¨®n se mueve en el filo que separa lo legal de lo ilegal
A ver si encima de ser aplastado por pobre, te matan los papeles extraviados del Ministerio del Interior
Que el ministerio de la Realidad no exista no significa que no sucedan cosas
Los partidos tienen m¨¢s complejidades que un juguete mec¨¢nico, muchas m¨¢s que un reloj de p¨¦ndulo
Vivimos como si por abajo pasara lo mismo que pasa por arriba, como si todo fuera cebolla, y nada m¨¢s lejos de la realidad
Pedro S¨¢nchez dice que ha visto agua en la piscina, que es como el que ve un oasis quiz¨¢ irreal en el desierto, y se ha lanzado al vac¨ªo
La vida, en fin, no tiene por qu¨¦ ser veros¨ªmil, lo que no quiere decir que nos creamos cualquier cosa
Esta es una de las razones por las que la electricidad sube normalmente cada d¨ªa
?D¨®nde se refugia el yo cuando recibimos una mala noticia; d¨®nde cuando nos dan una alegr¨ªa; d¨®nde cuando necesita estar solo?
Deber¨ªamos impulsar acciones que obligaran a los partidos a trabajar en vez de lamerse las heridas
Las voces saben lo que dicen. Mi sacrificio hab¨ªa tenido su recompensa
El desconocido me mira, pero no me ve. No repara en que vamos vestidos igual
Entre el suelo electoral del PSOE y el techo electoral de Podemos se extiende un desierto
?Por qu¨¦ nos atacan con tanta fuerza pensamientos que intentamos desechar sin ¨¦xito?
Hay cientos de empresarios espa?oles deseando meter la cuchara en el pastel precapitalista de la isla
Ella se durmi¨® antes, como extenuada por el parto, y ¨¦l permaneci¨® despierto media hora, un poco inquieto por la presencia del animal en el dormitorio
Mi consejo es que dejes de buscar el Aleph y empieces a buscar la rata
Como dec¨ªamos, sucedi¨® en la Prehistoria. Olv¨ªdense de los cambios de paradigma hist¨®ricos: un juego de ni?os al lado de los cambios de postura prehist¨®ricos
Pensaba responderle hoy, me excuso, y salgo a la calle confundido