Escribe en EL PA?S desde 2003, donde tambi¨¦n ha ejercido como subjefa del Lab de nuevas narrativas y la secci¨®n de Sociedad. Actualmente forma parte del equipo de Fin de semana. Es m¨¢ster de EL PA?S, estudi¨® Periodismo en la Complutense y cine en la universidad de Glasgow. Ha pasado por medios como Efe o la Cadena Ser.
Espa?a tiene ganas de volver a algo que huela a normalidad. As¨ª se despidieron hosteleros, j¨®venes y vulnerables de las restricciones que han acabado esta noche
El excepcional hallazgo de una gran obra de arte supone para el due?o adem¨¢s de un enriquecimiento, no siempre inmediato, una serie de costes y responsabilidades
El 14 de marzo de 2020 se declar¨® el estado de alarma y nacieron alrededor de mil beb¨¦s en Espa?a. As¨ª han sido los primeros 365 d¨ªas de vida de Dar¨ªo Coracho y Gael Fisher que, como otros ¡®pandemials¡¯, trajeron luz a sus casas en el a?o m¨¢s oscuro
El popular pensador esloveno dice que solo unidos nos salvaremos. Si a¨²n no lo hemos aprendido, necesitamos nuevas crisis que nos hagan m¨¢s solidarios
¡°Estoy mal¡±, te dices, porque la culpa no te deja admitir que, en el fondo, est¨¢s mejor. En casa, en pijama, tocando a cualquier hora a los que amas
El diario inicia una etapa clave con la implementaci¨®n de un modelo de suscripci¨®n digital. Los lectores podr¨¢n acceder a 10 art¨ªculos mensuales; despu¨¦s necesitar¨¢n suscribirse. El precio es de 10 euros al mes, con una oferta del primero por un euro. Este art¨ªculo pertenece a una serie sobre los pilares de EL PA?S
Esta semana los ministros de Medio Ambiente tendr¨¢n sus 'Reuniones de Alto Nivel' en la COP25. Anda que no molar¨ªa que bajasen de los cochazos el¨¦ctricos cantando ¡°Esto es pa¡¯ que quede, lo que yo hago dura¡±
M¨¢s de 200 asociaciones de padres y madres emitieron una declaraci¨®n para los l¨ªderes de la COP, imag¨ªnate el grupo de Whatsapp para consensuar el texto final
Fen¨®meno social y superventas purpurina, el filme de Disney mantiene el impacto en la cultura pop a los seis a?os de su estreno. La secuela llega ma?ana al cine
PETER DEL VECCHO, VICEPRESIDENTE DE PRODUCCI?N DISNEY
La escritora india Pallavi Aiyar alerta de que aunque el Gobierno indio emprendiera iniciativas ambientales hoy, los cambios no ser¨ªan palpables hasta dentro de 15 o 25 a?os
Seis meses despu¨¦s, en un barrio rico de Madrid, el hartazgo electoral hace mella y Santiago Abascal gana credibilidad entre un grupo de mujeres fieles al Partido Popular
Tocar el hielo azul del glaciar Engabreen, navegar por el poderoso maelstrom de Saltstraumen y admirar las hipn¨®ticas auroras boreales. Una aventura por los paisajes del norte de Noruega que han inspirado la segunda entrega de la saga Disney
Tres meses despu¨¦s de publicar en EL PA?S una serie de art¨ªculos sobre su experimento de vivir sin pl¨¢sticos, la autora cuenta c¨®mo intent¨® aplicar ese aprendizaje con su familia en verano y reconoce sus dificultades: ¡°Soy m¨¢s sostenible que antes, pero me siento culpable todo el rato¡±
Seis de los autores de los pasatiempos de los principales peri¨®dicos espa?oles desvelan algunos de sus trucos. A la profesi¨®n, muy masculinizada, se llega por casualidad o por herencia familiar
Patricia Gos¨¢lvez|Almonacid de Zorita - Sierra de Altomira (Albalate de Zorita, Guadalajara)|
Tras siete d¨ªas a pie para cubrir la distancia de una hora y media en coche, el destino est¨¢ en lo alto de un monte. Los caminantes trepan a la sierra de Altomira ligeros y cargados de emociones
Las cabras del rumano Dani Pudilic conviven con los turistas en Zorita de los Canes, donde Camilo Jos¨¦ Cela lleg¨® en coche en su 'Viaje a la Alcarria'. Las ancianas le recuerdan
Patricia Gos¨¢lvez|Perales de Taju?a - Ambite - Mond¨¦jar (Guadalajara)|
"Lo que m¨¢s me gusta es que en los caminos la gente te saluda", dice un paciente del centro de rehabilitaci¨®n de Ambite. Pasear lejos de los lugares t¨®xicos es parte de su terapia
Fil¨®sofos y exploradores prometen silencio interior y libertad en el camino. En la ruta hacia Morata de Taju?a, pol¨ªgonos, f¨¢bricas y un incidente insisten en llevarles la contraria
Seguimos los hitos del Camino de Ucl¨¦s, recuperado por un jubilado de Rivas, pero el destino nos aleja del peregrinaje y acabamos en un hotel de cuatro estrellas
Salir de Madrid andando supone atravesar un inquietante umbral entre lo urbano y la naturaleza. Vertederos, campos de trigo, conejos y autopistas que funcionan como fronteras de una ciudad cerrada sobre s¨ª misma