El ¡®proc¨¦s¡¯ estrena su cuarta temporada
El nuevo ciclo abierto con el pacto PSC-ERC y la investidura de Salvador Illa sugiere la pregunta de si se camina hacia una rep¨²blica catalana ¡®de facto¡¯
El nuevo ciclo abierto con el pacto PSC-ERC y la investidura de Salvador Illa sugiere la pregunta de si se camina hacia una rep¨²blica catalana ¡®de facto¡¯
Las aportaciones del Nobel de Econom¨ªa en 1995 fueron m¨¢s all¨¢ de la teor¨ªa de la revoluci¨®n de las expectativas racionales
Ya no se habla en la campa?a electoral de las reformas que Italia necesita sino, una vez m¨¢s, de fascismo y comunismo
Es necesario actuar sobre un sistema que va a ser extremadamente costoso, por no decir inviable en un futuro pr¨®ximo. La propuesta que puede ofrecer mayor bienestar es la que se conoce como mochila austriaca
Un hipot¨¦tico Gobierno constitucionalista en Catalu?a estar¨ªa m¨¢s en l¨ªnea con la nueva Europa
Hace 50 a?os la CEE daba un enorme salto adelante que ha influido en la configuraci¨®n actual de Europa
Es importante llamar la atenci¨®n sobre otras caracter¨ªsticas de la nueva l¨ªnea de cr¨¦dito, de ellas depende su utilidad
Hay que reparar las cadenas de valor de las empresas y reconstruir la econom¨ªa sobre una base nueva y sostenible, mediante la inversi¨®n en bienes p¨²blicos comunes y una econom¨ªa m¨¢s verde
Har¨¢ falta un acuerdo de m¨ªnimos para lo que quiera que vaya a ser el autogobierno de Catalu?a y en ¨¦l deber¨¢n estar incluidos los que se oponen a aplicar el art¨ªculo de la Constituci¨®n que permite intervenir la autonom¨ªa
El balance global de estos cinco a?os es muy negativo para Catalu?a y Espa?a adem¨¢s de desastroso para el nacionalismo moderado, pero el fracaso independentista no garantiza una descentralizaci¨®n solidaria y estable
Estar a la altura del desaf¨ªo territorial exige, de entrada, reconocer cu¨¢nto ha cambiado nuestro pa¨ªs, no solo Catalu?a. Es el Estado en que m¨¢s han crecido los porcentajes de ingresos y gastos correspondientes a los Gobiernos aut¨®nomos
Lo peor de nuestra democracia es lo que se ha dejado de hacer. De nada sirve ir a otras elecciones si la miop¨ªa contin¨²a vigente. Una coalici¨®n basada en un programa de reformas es posiblemente la mejor soluci¨®n
El full de ruta dels independentistes ¨¦s car i conf¨²s, es basa en un discurs erroni i t¨¦ un final incert. Creu que la soluci¨® als seus problemes no passa per la solidaritat, sin¨® per crear un Estat que pensi nom¨¦s en els interessos ¡®dels catalans¡¯
La hoja de ruta de los independentistas es cara y confusa, se basa en un discurso err¨®neo y tiene un final incierto. Cree que la soluci¨®n a sus problemas no pasa por la solidaridad, sino por crear un Estado que piense solo en los intereses ¡®dels catalans¡¯
La inquietud independentista ha de resoldre's amb negociaci¨® i comprom¨ªs, en cap cas per la via de la desconfian?a i la ruptura.
La inquietud independentista ha de resoldre's amb negociaci¨® i comprom¨ªs, en cap cas per la via de la desconfian?a i la ruptura
La inquietud independentista tiene que resolverse con negociaci¨®n y compromiso, en ning¨²n caso por la v¨ªa de la desonfianza y la ruptura. Es necesario recuperar la confianza mutua y la responsabilidad ciudadana
Europa parece haber reaccionado a la crisis m¨¢s r¨¢pidamente que Jap¨®n, aunque con m¨¢s lentitud que Estados Unidos. Pero no est¨¢ haciendo la inversi¨®n en capital necesaria para mejorar su productividad
La cuesti¨®n para Artur Mas no deber¨ªa ser la independencia, sino si el objetivo es construir una ¡®Catalunya oberta¡¯; es decir, con instituciones democr¨¢ticas estables, abierta a la cr¨ªtica y con igualdad de oportunidades
La crisis revela la debilidad de la econom¨ªa y de las instituciones democr¨¢ticas. Es obligado reforzar las pol¨ªticas a largo plazo, con el fin de recuperar la confianza de los ciudadanos en los gestores p¨²blicos
Catalu?a y Grecia comparten la voluntad emancipadora de tomar las riendas del propio destino. Pero conviene cultivar una fr¨ªa racionalidad para ayudar a encontrar una solidaridad sin agravios en la adversidad de la crisis
Para ser m¨¢s competitiva, nuestra econom¨ªa del conocimiento requiere financiaci¨®n, pero tambi¨¦n reformas. La crisis puede restringir lo primero, pero no hay justificaci¨®n para no hacer lo segundo
A diferencia de EE UU, Europa comenz¨® la casa por el tejado: creando una uni¨®n monetaria sin contar con una unidad fiscal, pero a¨²n podr¨ªa usar su capacidad financiera y monetaria para superar el problema de la deuda
Para su continuidad y prosperidad, la zona euro tiene que resolver el problema de la deuda excesiva de los pa¨ªses perif¨¦ricos sin colapsar la banca y debe dise?ar un mecanismo de disciplina fiscal a largo plazo
La decidida acci¨®n del BCE, los pa¨ªses del euro y el FMI es un cambio hist¨®rico en la relaci¨®n entre la pol¨ªtica monetaria conjunta y las pol¨ªticas fiscales nacionales. Ahora, hay que aplicar los cortafuegos dom¨¦sticos
La crisis no se ha gestado en el mercado laboral, pero el espa?ol precisa una reforma. Se trata de no seguir fomentando la destrucci¨®n del capital humano. Tambi¨¦n debe cambiar el modelo del Banco Central Europeo
Por muchos paralelismos que existan entre las dos grandes quiebras financieras, estudiar las diferencias podr¨ªa servir para evitar una recesi¨®n duradera. La pol¨ªtica central debe facilitar crear empleo privado estable
El autor, secretario de Estado de Pol¨ªtica Cient¨ªfica y Tecnol¨®gica, analiza los esfuerzos que en el ¨²ltimo a?o se han llevado a cabo para apoyar la investigaci¨®n
La tormenta del sistema financiero internacional del pasado mes de marzo lleva al autor a plantearse el futuro del Sistema Monetario Europeo y de la Uni¨®n Monetaria Europea, as¨ª como qu¨¦ pol¨ªtica debe seguir un pa¨ªs de moneda d¨¦bil como Espa?a.
Acabar con los abusos de poder que se traducen en extraer propinas arbitrarias de los contratos p¨²blicos ayudar¨¢ a sanear la sociedad civil y la econom¨ªa italianas, se?ala eautor. Pero es ingenuo pretender que se puede acabar con toda forma de corrupci¨®n cuando hay una gran presencia del sector p¨²blico en la econom¨ªa.