¡®M¨¢laga 451¡¯ se consolida como festival literario
La exposici¨®n 'Borges y Kodama: infinito encuentro¡¯ homenajear¨¢ a uno de los escritores en espa?ol m¨¢s importantes del siglo XX
Para aliviar la espera
La necesidad del sentido
La venganza de Luc¨ªa
Juan Jos¨¦ Mill¨¢s ha escrito una novela abrupta y enigm¨¢tica, casi sin respiro, pero que encierra adem¨¢s un brusco, aunque calculado, cambio de direcci¨®n
Mill¨¢s novela la carrera de una taxista en busca del amor y la libertad
El escritor presenta su nuevo libro, ¡®Que nadie duerma¡¯, un relato impregnado de iron¨ªa
Juan Jos¨¦ Mill¨¢s: ¡°Llego a muchos libros por olfato¡±
El autor charla sobre lecturas con Berna Gonz¨¢lez Harbour. Acaba de publicar 'Que nadie duerma'
Hace fr¨ªo
Clandestinidad y dicha
Forges deja un mundo en el que todos y cada uno de nosotros ha quedado dibujado
Dos mitades pegadas
¡°Busco la puerta que conduce a la realidad porque estamos en el delirio¡±
Juan Jos¨¦ Millas publica la novela ¡®Que nadie duerma'
El mercado ataca de nuevo
Es el mercado, amigo
De la reforma laboral, ni mu
Entre Chueca y Gran V¨ªa
La letra y el esp¨ªritu
El fr¨ªo arrecia
El hijo del amado
El motor de los pies
La lucha final
Juan Jos¨¦ Mill¨¢s era Carlos Cay, aquel monstruo adolescente
El escritor recupera como libro una parte de la serie que escribi¨® para este peri¨®dico bajo seud¨®nimo
Santiago Posteguillo inaugura el Hay Festival de Segovia
El escritor protagoniza el pr¨®logo de la cita cultural con la lectura de 'La legi¨®n perdida', su ¨²ltima novela
Lleva cuidado con lo que deseas en la juventud
La realidad colabora en la creaci¨®n del estereotipo para que coincida con nuestra idea Quien descubre el Aparato Imaginario se convierte en un individuo libre
A m¨ª, de adolescente, me prohibieron las novelas
Juan Jos¨¦ Mill¨¢s firma esta serie, que se basa en los beneficios innumerables de la lectura y resulta un muy gozoso grito de viva a la literatura
Las ficciones tan temidas
Cuando la realidad nos termine por ahogar, pediremos que las pel¨ªculas o los libros anuncien desesperadamente: ¡°Basados en hechos irreales¡±
La nada
Pan de pay¨¦s, pan blanco, como el folio que no consigo llenar si no es con muchas historias que no hacen una
El no-res
Pa de pag¨¨s, pa blanc, com el full que no aconsegueixo omplir si no ¨¦s amb moltes hist¨°ries que no en fan una
El saltamart¨ª de Dal¨ª
Juan Jos¨¦ Mill¨¢s obligava els seus alumnes d¡¯un taller de literatura a descriure un escarabat
La sombra del poder
Mill¨¢s fabrica una cruda f¨¢bula moral sobre la indolencia del poder o su inoperancia. Su protagonista es un empleado que ha dejado de serlo por un despido tramposo
Mill¨¢s se adentra en la metaf¨®rica oscuridad de un armario
El escritor presenta ¡®Desde la sombra¡¯ en Madrid y comparte fobias ante el p¨²blico
¡°Lo mejor para los escritores es estar muertos¡±
El autor valenciano publica ¡®Desde la sombra¡¯, una novela muy personal
Anatom¨ªa patol¨®gica
El huevo, que deb¨ªa albergar el Instituto de Medicina Legal de un Campus de la Justicia, ha devenido objeto de an¨¢lisis forense
El novio de la muerte
Francisco Camps da palmas, Rita Barber¨¢ no cabe en s¨ª de gozo
La elegancia de los complementos
Se dio cuenta de que se hab¨ªa puesto por error un cintur¨®n claro y unos zapatos negros. O se cambiaba de cintur¨®n o los zapato
La venganza se sirve en plato fr¨ªo
He aqu¨ª la forma en la que Rajoy devuelve a Pedro S¨¢nchez el ¡°indecente¡± que le hab¨ªa dejado a deber
Presentaci¨®n y representaci¨®n
Los Clinton fingen que desayunan en un bar de New Hampshire, adonde los ha conducido la campa?a electoral de Hillary
Tenebrismo espa?ol
El claroscuro acojona, no por el contraste entre luz y sombras, sino porque tiene uno la impresi¨®n de que gana siempre la materia oscura
Como el que oye llover
El hombre grita que le esperen. Se ha retrasado al tomar a su hija en brazos y teme descolgarse por completo del grupo
El sal¨®n era el mensaje
Nos sentamos frente a la tele para apreciar las virtudes del nuevo cap¨ªtulo de una serie con la que nos hemos hecho mayores
Lo anormal dentro de lo normal
Estaban ah¨ª, tan tranquilos, en sus cosas, sin meterse con nadie, cuando atraves¨® el pasillo un par de soldados imperiales
Viva el deshielo
?Se imaginan a Esperanza Aguirre y a Ana Botella del brazo, fuera del coche oficial, dando un paseo por las calles de Madrid?