El presidente de Portugal persigue a los eucaliptos con sus propias manos
Para enfado de la industria papelera, la primera autoridad del pa¨ªs culpabiliza de los incendios a este ¨¢rbol no aut¨®ctono
Hace un a?o que Portugal, literalmente, ardi¨®. Primero en junio y despu¨¦s en octubre, en total 112 personas muertas y m¨¢s de 500.000 hect¨¢reas de vegetaci¨®n calcinadas. Un a?o despu¨¦s, el presidente del pa¨ªs, el inquieto Marcelo Rebelo de Sousa, se ha echado al monte para arrancar eucaliptos con sus propias manos, culpando as¨ª a esta especie arb¨®rea de la tragedia de 2017.
¡°Es la primera vez que lo hago con guantes¡±, explicaba el presidente a las c¨¢maras mientras arrancaba de ra¨ªz brotes de eucaliptos, "esto se ha sofisticado". Rebelo de Sousa visit¨® hace unos d¨ªas Vouzela, un municipio de 12.500 hect¨¢reas que el a?o pasado perdi¨® gran parte de su riqueza forestal. En sus montes, delante de las c¨¢maras, arrancaba eucaliptos y plantaba especies aut¨®ctonas, robles y encinas, principalmente.
Desde los incendios del pasado a?o, el eucalipto es un ¨¢rbol maldito para el vulgo, pero tambi¨¦n para los parlamentarios y para la primera autoridad del pa¨ªs. Sobre el eucalipto se ha cargado la culpa de la tragedia, por su crecimiento depredador, aunque el pasado a?o ardi¨® tanta ¨¢rea de eucalipto como de pino, otro depredador, aunque, en este caso, aut¨®ctono.
¡°Se trata de mantener una floresta equilibrada, menos susceptible a los incendios¡±, explicaba el presidente (a punto de cumplir los 70 a?os) mientras segu¨ªa con su tala manual. ¡°Me encanta hacer esto¡±.
En busca de culpables de la tragedia, el eucalipto es el enemigo a batir. Aunque los especialistas no lo condenan tan simplemente, los pol¨ªticos s¨ª. Si antes de los incendios estaba prohibido aumentar el ¨¢rea dedicada a este ¨¢rbol, ahora tambi¨¦n se ha prohibido replantar con la misma en las zonas de eucalipto quemadas.
Los expertos forestales, sin embargo, dan mucha m¨¢s importancia al mantenimiento del bosque, a su limpieza y vigilancia, y a la creaci¨®n de franjas arb¨®reas de diferentes especias que a la caza y captura del eucalipto.
El activismo del presidente contra el eucalipto no ha sentado nada bien a la industria papelera del pa¨ªs. La principal, Navigator, a causa de las restricciones en la plantaci¨®n, tiene que importar madera de Galicia. En defensa de este ¨¢rbol, su preferido por el r¨¢pido crecimiento, recuerda que en los incendios del pasado a?o, apenas el 1% de su ¨¢rea cultivada se quem¨®, y que sus servicios privados contrafuegos trabaj¨® principalmente para sofocar incendios en propiedades ajenas.
El eucalipto se introdujo en la pen¨ªnsula Ib¨¦rica en el siglo XIX, aunque hasta mediados del siglo pasado no se aprovech¨® para pasta de papel. Fue en 1957 en las instalaciones de Navigator en Cacia, donde se fabric¨® por primera vez en el mundo. Hoy es el mayor fabricante de papel blanco.
El verano y el oto?o actuales, pese a su sequedad, no han tra¨ªdo desgracias humanas. Bajo fuertes multas, el Gobierno oblig¨® a los due?os de fincas rurales a limpiar los alrededores de sus dominios, al igual que a los Ayuntamientos. Aunque la labor en muchos casos era imposible, ese estado de alerta generalizado, con un aumento de la vigilancia y una reacci¨®n m¨¢s r¨¢pida a los incendios han evitado que se repitiera el desastre de 2017. Los efectos de la repoblaci¨®n forestal, con m¨¢s especies aut¨®ctonas, se ver¨¢n, como dice el presidente, en una d¨¦cada, pero ¨¦l, de momento, arranca eucaliptos y planta robles.
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